La desventaja física nunca lo amilanó
Iván Calderón siempre se enfrentó a boxeadores de mayor tamaño, algo que se acentuó cuando saltó a las 108 libras
Tras dominar las 105 libras durante cuatro años y a pesar de que daba el peso con comodidad, Iván Calderón decidió subir de división e invadir las 108 libras, colocándose en incluso mayor desventaja de alcance, peso y corpulencia.
“Mucha gente quizás no sabe que en casi todas mis peleas, yo iba con tipos que me llevaban mucho peso de ventaja. Incluso en mis primeras peleas, los rivales a veces me llevaban cuatro, seis libras el día del pesaje”, recordó Calderón en entrevista con
El Nuevo Día para repasar su carrera . “No es lo mismo pelear con alguien de tu peso que con uno que te lleva esa ventaja”.
Como junior mosca, Calderón debutó retando al sólido peleador azteca Hugo Fidel Cázares. El mexicano, campeón de la OMB en ese peso, venía de dominar a tres boricuas —Miguel “Zamuray” Del Valle, Nelson Dieppa y Alex Sánchez—, lo que ganó fama de verdugo de boricuas.
Pero, con Calderón, fue otro cantar. Aunque Cázares era un peleador con pegada peligrosa, con buen dominio técnico y que podía pelear tanto en guardia diestra como a la zurda, el apodado “Iron Boy” lo desbancó con una estrategia digna de Napoleón.
Reconociendo que Cázares lo superaba cómodamente en todos los renglones físicos, Calderón salió agresivo, sorprendiendo al campeón con su redoblada ofensiva, presionándolo desde la campana inicial y obligándolo a retroceder varias veces en la primera mitad del encuentro.
“Yo sabía que (Cázares) no se esperaba eso y mi plan era caerle arriba desde temprano para asegurar esos asaltos y poder boxear más defensivo cuando el viniera fuerte en la segunda mitad”, explicó Calderón.
La genial estrategia le rindió el fruto esperado. El boricua tomó control del combate en los primeros asaltos y aunque visitó la lona en el octavo asalto, resistió el intento de remonte de Cázares, campeando la tormenta en los asaltos de campeonato para vencerlo por decisión dividida.
Su reinado como junior mosca fue más breve. Venció a Dieppa en su segunda defensa de este título y superó a Cázares en la revancha, antes de empatar con Rodel Mayol y vencerlo en su segundo duelo.
Giovani Segura destronó a Calderón vía nocaut en ocho asaltos el 28 de agosto del 2010 en Guaynabo. Iván viajó a México para la revancha inmediata, pero cayó por nocaut en el tercer asalto.
Tras vencer a Felipe Rivas en 2011, Calderón retó al entonces
campeón 105 libras de la OMB, el mexicano Moisés Fuentes, quien lo detuvo en el quinto.
Iván colgó los guantes con marca final de 35-3-1 y seis triunfos por nocaut. Superó a ocho otrora campeones mundiales y hoja de 18-3-1 (dos nocauts) en peleas de título.
Cuando anunció su retiro, el cronista boxístico de ESPN, Dan Rafael, lo describió como “el peleador más popular que han tenido los pesos chicos, con la excepción de Ricardo ‘Finito’ López”.
Hoy día, Calderón trabaja como entrenador de boxeadores aficionados y profesionales. En ese nuevo rol, se ha ganado rápidamente el respeto de los veteranos.